Una de las cosas que con frecuencia hablamos en mi podcast de la jornada de crecimiento y desarrollo personal, es la consistencia, ¿Cómo puedo yo hacerme más consistente? ¿Cuál es el secreto de ser consistente? O ¿Por qué algunas personas son más consistentes que otras?
De alguna manera u otra, todos nosotros estamos buscando la forma de cómo hacernos más consistentes. Si me conoces, sabes que soy un amante de las 15 Leyes Indispensables del Crecimiento, de nuestro amigo y mutuo mentor John Maxwell y específicamente la ley número cinco habla de la consistencia y esta ley tiene un encabezado que gusta porque dice que la motivación nos ayuda a empezar y la consistencia nos ayuda a terminar.
Quiero ayudarte y contribuir a ese deseo de tu ser más persistente, más consistente y quiero compartir contigo cinco cosas que debes saber y hacer para elevar tu nivel de consistencia:
- Debes saber en qué quieres crecer.
¿Cuál es el área en que quieres crecer? En tu actitud, en tus pensamientos, en tu matrimonio, finanzas, liderazgo… en qué quieres crecer? porque debes primero hacerte consciente (que es otra ley), es decir, saber dónde o qué tienes que cambiar y una vez que te haces consciente, puedes de manera intencional (que es otra ley) darle al mismo blanco, una y otra vez. No puedes ser consistente en algo hasta que no sabes qué o cuál es esa área que deseas crecer.
- Debes saber cómo debes mejorar.
Pensando primero en los demás, olvidándome de mi un poco y pensando más en ti, es la manera de mejorar en mis relaciones, por ejemplo. ¿Cómo mejoro en mis finanzas? Aprendiendo a manejar un presupuesto, aprendiendo a controlar mis gastos impulsivos.
Cómo pueda mejorar en una área, me ayudará a ser más consistente porque puedo ir una y otra vez al mismo punto.
- Debes empezar por las cosas simples.
Por eso me has escuchado hablar una y otra vez, del poder de un paso. Un paso no me lleva a donde quiero llegar pero me saca de donde estoy. Con un paso es que comienzo a convertirme, un paso es lo que me hace moverme para llegar a la transformación.
Empieza por lo simple, por las cosas pequeñas. Empieza con lo que tienes, haciendo lo que puedas, desde el lugar donde estás.
Tu impacto en lo profesional es el resultado de quien eres y te estás convirtiendo en lo personal. El impacto exterior es un producto del crecimiento interior y es mucho más fácil hacer un crecimiento interior que tener un impacto en el exterior porque puedes decidir crecer hoy. Hay grandeza en la simpleza. Todas las cosas grandes que disfrutamos, una vez fueron pequeñas.
- Debes tener paciencia, sé paciente.
No me malinterprete, no te estoy diciendo que te quedes estático (a).
Puedes ser paciente y estar en movimiento, creando, avanzando, dando el primer paso. Debes tenerte paciencia. Hay una ley que es la Ley de Gestación, donde dice que todas las cosas en el mundo tienen un periodo para gestarse. Ten paciencia porque tu paciencia hoy puede abrir las puertas hacia tu grandeza mañana. Tenle paciencia a los demás, tu paciencia hoy puede ser la grandeza de alguien mañana.
Si estás constantemente trabajando en lo que debes crecer, haciendo las cosas como debes mejorar, dando los pasos simples de manera paciente, te garantizo que alcanzaras el nivel de crecimiento que quieres, pero debes ser consistentemente paciente.
- Debes valorar el proceso.
Las personas que han hecho de ganar un hábito, valoran el proceso de ganar. El proceso de ganar indica práctica, repetición, indica fallar, reajustar, aprender y volver a intentarlo. Debes entender que el crecimiento no es algo de la noche a la mañana, es un proceso y ese proceso debe consistentemente vivirse todos los días. Olvídate de los resultados, enfócate en valorar y vivir el proceso.
Todas las cosas cuando estaban en un 50 % se veían mal, piensa en tu carro, aun siendo un carro del año se veía mal cuando estaba a la mitad de su elaboración o producción. No te ves como quieres verte pero no estás como empezaste, valora el proceso.
¿Quieres aumentar tu nivel de consistencia? Tienes que saber donde quieres crecer, como debes mejorar, empieza con las cosas simples, tente paciencia porque Dios no ha terminado contigo y por último valora el proceso porque todo lo que vemos se veía mal a la mitad de su elaboración y tu no estas donde quieres llegar pero definitivamente no estás donde empezaste.
La ley de la consistencia nos dice y enseña que la motivación nos ayuda a empezar pero la consistencia, la persistencia, nos ayuda a terminar.
Espero que esto te sirva.
Tu hermano y amigo,